Cuántas
veces nuestras madres y abuelas nos han dicho "tápate que te
vas a costipar" o nosotros mismos, al estornudar delante
de otra persona hemos dicho "se ve que he cogido frío".
Es cierto
que en invierno es cuando más nos resfriamos, las infecciones
respiratoras están tan al orden del día que hasta mis gatos se
constipan.
Sin
embargo son otros los factores que influyen en que nos costipemos:
- Permanecemos en espacios sin ventilar, cerrados, durante mucho tiempo.
- Nos sometemos a cambios bruscos de temperatura cuando entramos de la calle a casa.
- El uso de sistemas de calefacción repercute en la humedad ambiental. Nuestras mucosas se resecan, y en concreto la de la nariz se queda sin esa protección que le aporta la humedad y eso favorece que los virus penetren.
- El resfriado es un virus... y los virus solo se contagian.